La experiencia de los ingenieros que conforman Grupo GPA tiene su origen en el proyecto de formación de capital humano con los jóvenes que se acercan a la compañía a través del Parque de Innovación y Mentefactura GPA.
En este espacio impulsamos el talento, la formación y el desarrollo profesional de los jóvenes, guiado por el conocimiento de los ingenieros experimentados dentro del grupo encaminados hacia la innovación tecnológica.
Es importante mantener vínculos con universidades tecnológicas del estado, a fin de poner en marcha proyectos en conjunto, pues sabemos que tienen por delante el reto de integrarse como pieza clave en la cadena de valor.
Por ello, desde el Parque se busca afianzar la coordinación con los centros de formación profesional a fin de lograr abastecer al mercado de profesionales preparados para los nuevos desafíos, de esta manera se logra trasladar el conocimiento tecnológico e innovador a la industria y viceversa.
Destacar el valor que hay entre universidad-empresa es importante para GPA. Sabemos que hoy en día la educación superior coordinada con la industria es necesaria para la formación de talento humano, toda vez que las instituciones educativas aportan valor a la sociedad.
Es necesario reconocer el círculo el virtuoso que surge con las empresas, así como la manera de direccionar al talento para que logren poner en el mercado bienes y servicios que merezcan ser elegidos por clientes y consumidores.
En GPA entendemos que la universidad y la empresa no funcionan como vías separadas, sino que son dos entidades cuyos intereses son convergentes, ya que el bienestar de una sociedad depende tanto de la educación como de la capacidad de las empresas de generar desarrollo y espacios laborales.
La universidad debe integrarse en una cadena de valor con la industria, pues ésta también tiene injerencia en proyectos de emprendimiento y de inversión, para crear esta cadena de valor se requiere que las universidades guíen sus desarrollos tecnológicos hacia una visión de valor, ya que, al vivir en una sociedad del conocimiento, éste se debe cuidar como capital esencial.